martes, 7 de julio de 2009

AMERICO VALENZUELA NOS ESCRIBE

POR UN MUNDO LLENO DE AMOR Y DE BONDADES
Américo Valenzuela G.
Circula en la Internet una secuencia fotográfica que muestra como un film, variados momentos del gesto solidario de un avecilla azul.
Las imágenes en vivo se corresponden con un instante profundamente dramático que pudo ser eternizado por medio de la cámara fotográfica.
El ave aparece en los cuadros fotográficos realizando ingentes esfuerzos por levantar del pavimento a su acompañante, quien previamente golpeado cae herido de muerte.
El acto en escena resulta increíblemente estremecedor y emotivo, y una verdadera enseñanza sobre el imperecedero y misterioso sentimiento de los seres.
Por la enorme cantidad de gestos y esfuerzos allí desplegados, a pesar de las limitaciones propias de un ave pequeña.
Pues solo ha de contar con su pico y sus alas, y a veces con sus patitas. Pero sobretodo con el inmenso deseo de ayudar a su amigo.
Amar rompe las limitaciones todas. Todos los parámetros. Todos los esquemas. Gestos como la bondad y la caridad son motorizados por sentimientos que no poseen fronteras.
Insólito! , es la palabra que emerge de adentro, si observamos las escenas. Asombrado se queda cualquiera ante el persistente y continuo empeño y esfuerzo por salvar al compañero de aventuras.
Hay que estar dotado de una verdadera dosis de amor para insistir tanto. Uno se pregunta entonces, al comparar actitudes, cual seria el grado de amor y de bondad que acompañaran al Cristo Jesús.
Al apersonarse ante la tumba de su Amigo, Lázaro, y llorarlo con ellos su muerte. Como si sintiera culpa por la ausencia, y no poder evitarlo. Para proceder a levantarlo de las cenizas, en un ingente esfuerzo que solo pudo resultar gracias al mas puro amor.
Al salvar a la hija de Jairo.
Cual calidad y cuan cantidad de amor y de bondad se requieren para ello..?
Cuanto amor derramo como para lograr levantarse en la resurrección, para vencer a la muerte y regresar a la vida..?
Cuanto amor requirió si ya no necesitaba volver a la carne. Y por amor a la humanidad asumió la responsabilidad de morir en la cruz en aras de mostrarnos una puerta y un sendero..?
Insólito!, es la palabra que emerge desde adentro. Insólito aparenta, después de todo, el retorno del Maestro a la Tierra.
Por un acto de Amor y Bondad.
En aras de reordenar Nuestro Mundo y su Raza Plano Ascendidos .
Hay tantos actos de amor en la tierra, tanta bondad derramados a diario.
Tantas Madres levantando sus hijos, tanta gente perdonando ofenzas… Nada supera amar y perdonar.