Reunirse con Frei Betto, oirlo... es renovar la esperanza por un mundo mejor y posible.
Es confirmar que no todo está perdido y que es necesario ir a las raíces para unir el elemento nacional en la necesidad de construir la fuerza posible para el cambio.
De ahí que para los dominicanos ir a la Fe del Patricio es vital en la constitución del frente necesario para derrotar a los malos dominicanos que hacen de la Patria un negocio particular.
Juan Pablo Duarte es la fuerza moral y el ejemplo que debe guiarnos siempre para hacer posible la patria digna que soñó...