no detenerse un instante
es la vida que nos lleva
en armonía con la naturaleza
con la dulce razón de la vida, el amor
atrapar un amanecer a orilla del río Jima
al pie de la montaña
es un placer de poeta
de eterno soñador...
allí en ese Bonao de Aniana nos bañamos en las aguas cristalinas de sus ríos
y la poesía se desliza cual corriente veloz del Jima que convoca a extinguir el calor en sus frías aguas
y colores encendidos en un atardecer de amores y versos que hacen Santa la Semana Mayor
y todo discurre entre frijoles con dulces y baños
que rejuvenecen a los que van sintiendo los golpes del calendario, pues el Jima gime contra el tiempo y nos llena de su canto de eternidad, la juventud...
que rejuvenecen a los que van sintiendo los golpes del calendario, pues el Jima gime contra el tiempo y nos llena de su canto de eternidad, la juventud...