Es el Cristal de la vida, un rostro angelical; con mirada extendida al horizonte...
la ingenuidad disipada en el biberón
y la ternura bañada en la sencillez desnuda de un niño/una niña
y todo desborda los laureles de un parque
entonces todos queremos ser niños/as y dormir entre las piernas de una madre que nos abriga...
irnos lejos en una batea llena de agua
y jugar con barquitos de papel
dormir lejos del mundanal ruido
o con el, no importa... dormir!
Irnos río abajono importan las piedras
ni la corriente fuerte
solo irnos
allí tendidos, río abajo
no importa si es el Masacre o el Jima
una corriente alegre de aguas cristalinas sin rumbos pensados
solo hoy sabemos que el destino es el mar... en una isla pequeña, aún bañada de febrero en caracoles, todas las corrientes van a parar al mar
esas aguas bañadas de espumas blancas como la inocencia dormida del niño que deambula fuera de problemas, solo en juegos y olvidos...
Irnos en el tiempotras una muralla
o unos muros abandonados
señal de tiempos idos
ruinas alegres de tiempos
malvados que no volverán
ruinas hermosas que encierran años de dolores
inmensos, de sangre derramada en una época de luto y de olvidos, de masacres e impunidades ...
Irnos perdiendo en la mirada de un bosque que no duerme y que se duele de nosotros y puja para darnos agua cristalinaa pesar de las heridas de la irracionalidad del manejo agroecológico
y así un despeñadero de hermosura cuando rompe la aurora y nuestra vista queda extasiada de placer ante tantos contrastes de belleza y las nubes nos invitan a flotar con ellas en el más extraordinario viaje de sueños...
Y se nos pierde la mirada de futuro cuando vemos la inocencia hermosa de la niña que sus ojos nos convocan al retornoy todos queremos volver a jugar barquitos de papel
todos queremos volver a ser inocentes en las faldas de una madre amorosa y buena... es el Cristal de nuestros días..
