martes, 7 de diciembre de 2010

LEONEL FERNANDEZ VS EL 4%


Por Juan F. De la Rosa


La sociedad dominicana está decidida a luchar para tener una educación acorde con los nuevos tiempos. Esto explica que diversos sectores de la vida nacional se hayan integrado de manera militante a luchar para que el gobierno cumpla con la Ley de Educación.


Al nivel que ha llegado el reclamo popular debe servir de estimulo a la Coalisión por una Educación Digna, y su 165 organizaciones que han mantenido el entusiasmo y la lucha por el 4% en todas partes.



Ya no es posible que la nación pierda esa meta, porque la simbología contenida en las sombrillas llegó al Palacio Nacional, Congreso de la República y Ministerio de Economía. Pocas veces hemos visto una colectividad integrada como ahora, con un objetivo claro: El 4% corresponde a la educación.

o Preparémonos para seguir cosechando la siembra que nos ha dado el presidente Leonel Fernández a nivel internacional, consistentemente, que la República ocupe siempre el último lugar en este aspecto.


Hace unos meses entrevistamos, conjuntamente con Alfonso Torres Ulloa, a la Dra. Mari Cantisano, especialista en educación, con la autoridad académica que posee ésta ilustre dama, dijo muchas cosas graves sobre el tema, una afirmación que nunca olvido de ella fue cuando explicó que un niño de octavo curso tiene la preparación de un tercer grado, algo que ofende nuestra sociedad, porque estamos matando la imaginación y el desarrollo de la niñez dominicana, desde que llega por primera vez a la escuela. Ese dato que aportó la Dra. Cantisano coincide con la posición que tiene el país en los cónclaves internacionales.


La sombrilla que ahora tiene un nuevo rol entre nosotros, ha logrado movilizar la conciencia nacional a favor de una causa noble.


El 4% ya tocó a los intelectuales, empresarios, artista, escuelas públicas y privadas, etc., porque la mala educación nos afecta a todos, se manifiesta cuando vemos en las calles conduciendo un vehículo de manera inadecuada, los atracadores que cada vez van en aumento, funcionarios públicos que no tuvieron la formación suficiente para saber que el dinero del erario hay que respetarlo como algo sagrado.


Sin educación no podemos competir en ninguna área del saber, con los países vecinos.


Señor Presidente sin educación solo pueden beneficiarse los políticos del patio que en cada proceso electoral compran la conciencia de los electores, con la tarjetica solidaridad o llevándole un fogón moderno y ahí mismo frente a su casa le hacen la comida de ese día a los humilde.