Alfonso Torres Ulloa reproduce este artículo interesante sobre Vieques, pues durante años le tocó coordinar el Comité Dominicano de Solidaridad con Vieques, por la salida de la Marina de los EE. UU. de la Isla Nena, pero hoy y por muchos años estarán sus habitantes sufriendo las consecuencias de la alta contaminación allí provocada.
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Vieques: la isla acribillada
Por Silvio Gonzแlez (*)
La Habana, (PL)./ El 75 por ciento de la poblaci๓n de Vieques promueve una demanda judicial para ser indemnizados por el Gobierno estadounidense por da๑os causados al utilizar ese territorio puertorrique๑o como polํgono de tiro durante 62 años.
Por mแs de 200 dํas cada a๑o desde 1941 hasta el 2003, la Marina de Guerra us๓ a esa diminuta isla caribe๑a para ejercicios de entrenamiento militar y pruebas con municiones sin consentimiento de la poblaci๓n local, que vio infectados sus recursos naturales y la salud de sus empobrecidos habitantes.
La Marina se ha negado a revelar la lista completa de las cantidades de materiales utilizados en la isla y en el mar durante pruebas con armamentos de guerra de todo tipo.
Solamente entre 1984 y 1998 dejaron caer mแs de 80 millones de libras de bombas en ese lugar.
Acad้micos prestigiosos de la Universidad de Yale, de Georgia, de Puerto Rico, del Colegio de Ingenieros de San Juan y del Colegio de M้dicos y Cirujanos que presentaron sus descubrimientos a las cadenas NBC y CNN han demostrado que el agua, la tierra, el aire, y los alimentos estแn en contacto con altos niveles de metales pesados y otros contaminantes.
En esa isla, que es la mแs contaminada de todas las existentes en la Cuenca del Caribe, existe un 30 por ciento de mayor incidencia de enfermedades cancerigenas y un 25 por ciento mayor de mortalidad infantil, afirma en un amplio reportaje televisivo la cadena CNN.
Tambi้n tienen un 60 por ciento mแs de envenenamiento por metales, un 95 por ciento mayor por cirrosis hepแtica, un 381 por ciento mayor por hipertensi๓n y un 41 por ciento mayor de diabetes, asegura la doctora Carmen Ortiz Roque, epidemi๓loga de la Universidad de Harvard.
Historia de una tragedia.
La municipalidad de Vieques ocupa una isla al este de Puerto Rico y fue habitada por diferentes grupos indํgenas suramericanos por mแs de mil 500 a๑os antes de la llegada de la colonización española.
Desde 1514 los aborรฌgenes taํnos resistieron el dominio espa๑ol y en 1811 se fund๓ el pueblo de Vieques, el cual prosperó mucho durante d้cadas con el establecimiento de seis importantes centrales azucareros.
En 1939, Estados Unidos expropi๓ el 72 por ciento del territorio viequense para establecer una base militar y a partir de entonces la Marina de Guerra utilizó la parte oriental de la isla como polํgono para prแcticas militares.
La parte occidental se destinó tambié้n como dep๓sito secreto de materiales de guerra importados desde Estados Unidos sin el consentimiento, ni la supervisión de la poblaci๓n local.
Los habitantes de Vieques fueron forzados a vivir en una franja de tierra en la parte central de la isla y su principal sustento, la pesca, fue restringida por las constantes y da๑inas maniobras b้licas.
En 1947, la mitad de los viequenses se vio forzada a emigrar a Puerto Rico, o a Estados Unidos.
Desde hace muchos años distintos estudios han documentado la presencia de contaminantes orgแnicos, inorgแnicos y radioactivos tales como el ars้nico, aluminio, boro, cadmio, plomo y mercurio, entre otros, según un estudio de 1999.
La Marina, en febrero de 1999, admitió haber utilizado materiales radioactivos, como por ejemplo el "uranio empobrecido", por lo que se han documentado niveles radioactivos que exceden lo normal en un 200 por ciento.
Ademแs prob๓ armamentos con sustancias altamente t๓xicas como el NAPALM, el desfoliador Agente Naranja, el fósforo blanco y distintos tipos de explosivos y pesticidas.
El doctor Jorge Colón, de la Universidad de Puerto Rico, descubrió en 1999 que el 34 por ciento de la población teníํa en sangre niveles tóxicos de mercurio, el 55 por ciento estaba contaminado con plomo, el 69 por ciento con arsé้nico y cadmio, el 90 con aluminio y el 93 con antimonio.
La ni๑a Milivy Adams, de sólo cinco años de edad, murió de neuroblastoma, una enfermedad cancerigena que en Estados Unidos sólo ocurre en uno de cada 100 mil habitantes.
Cuando se enferman, los viequenses tienen que viajar varias horas por barco y en autobús hasta Puerto Rico para recibir quimioterapia porque no hay clํnicas en Vieques que ofrezcan este tratamiento.
El diario El Nuevo Dํa, inform๓ que el Pentแgono admiti๓ que utilizó secretamente la sustancia "fosfato de trioctilo" sobre sus propias tropas para conocer sus efectos en los humanos.
La situaci๓n de salud de los viequenses y sus reclamos legales tambi้n fueron el eje de un amplio reportaje de la revista Time en septiembre de 2009 donde se se๑ala que las prแcticas militares han producido una grave destrucci๓n a los "manglares, lagunas, playas, cocoteros y otros recursos naturales".
El Profesor Jos้ Seguinot Barbosa, Director del Departamento de Geografํa de la Universidad de Puerto Rico, en su estudio titulado, "Vieques, ecologํa de una isla acosada", sostiene que "la punta este de la isla donde la Marina realiza sus practicas de bombardeos indiscriminados constituye una región con mแs crแteres por kilómetro cuadrado que la Luna."
En el mismo trabajo plantea, que "la destrucci๓n de los recursos naturales y humanos se lleva a cabo violando las normas bแsicas del derecho internacional y de los derechos humanos y que a nivel federal y estatal se violan las leyes de manejo de la zona costera, de la calidad del agua, del ruido, de recursos subacuแticos y arqueol๓gicos, asํ como del uso del terreno, entre otros."
El ingeniero, Rafael Cruz P้rez, en un artํculo titulado, Contaminación producida por explosivos en Vieques, describe la situaci๓n del Cerro Matํas que fue la zona principal de tiro de la Marina como un campo de batalla durante la primera guerra mundial, donde el suelo y gran parte de la capa vegetal han sido reducidos a polvo, donde se notan fragmentos de proyectiles, al igual que proyectiles que no estallaron y asegura que ese lugar puede ser considerado como un dep๓sito gigantesco de peligrosos desperdicios sólidos.
Añade que, de acuerdo a informaci๓n dada por la Marina este material nunca es removido, sino que es detonado o simplemente tapado con tierra y que bajo los efectos de explosiones subsiguientes, las brisas marinas, y la meteorizaci๓n natural, los metales son oxidados convirtié้ndose en productos que pasan a contaminar el ambiente.
En 2003, después de una fuerte presión pública la Marina salió de Vieques mientras que hoy el gobierno del presidente Barack Obama, a través del Departamento de Justicia, ha reclamado "inmunidad" para tratar de cancelar un proceso judicial que puede costarle prestigio y muchos millones de dólares.
"Sin salud no hay paz", advirtió sin embargo Roberto Rabํn, portavoz del Comité้ Pro Rescate y Desarrollo de Vieques.
(*) El autor es jefe del Departamento de Difusión de Prensa Latina.
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